Resumen
En la literatura argentina reciente observamos cierta tendencia que establece una
nueva zona de pasaje entre lo literario y lo histórico a partir del retorno al peronismo.
La literatura de Juan Diego Incardona formula esta relación en los términos de una
construcción geopolítica de un territorio. El énfasis topográfico y la invención de una
lengua literaria con fuerte anclaje territorial proponen una cartografía tendiente a deconstruir
la antinomia centro/periferia mediante el desplazamiento hacia el conurbano
bonaerense. En este sentido, sus novelas entran en diálogo con la serie literaria de
los años cincuenta, tanto con la literatura filo como la antiperonista.