Resumen
Este trabajo analiza Boca de lobo (2000), de Sergio Chejfec, partiendo de la hipótesis de que en el texto se construye un futuro conjetural que tiene la forma de un porvenir brumoso y abrumador. Correlativamente, que el suburbio industrial se diseña más sobre la huella de tradiciones conceptuales y estéticas que sobre una base empírica o referencial, y en ese sentido el espacio urbano está construido por medio de mecanismos de desfiguración y desvanecimiento que tienden a esfumar lo real. La novela propone una indagación sobre el efecto que los restos del pasado producen en el presente. El trabajo interpreta esos restos en una triple dimensión: subjetiva, en la medida en que se refieren a un vínculo amoroso y las secuelas tras la ruptura; histórica, porque aluden al mundo del trabajo industrial en su punto de desintegración; y literaria, en tanto dejan oír resonancias de diversas tradiciones culturales que van del realismo social y el marxismo a la literatura gauchesca. Las tres dimensiones están imbricadas por los conceptos de “melancolía” (Freud, Butler) y “espectralidad” (Derrida), dado que expresan, respectivamente, la imposibilidad de dar por perdido el objeto y la persistencia fantasmática del pasado.