Resumen
La idea de generar un dispositivo capaz de contener ideas, narrativas y
reflexiones surgidas de la praxis social surgió en pandemia, en momentos en
los que tanto los encuentros como las propuestas de trabajo eran virtuales. En
esos momentos realizamos una convocatoria abierta desde nuestro espacio,
para darle forma a un libro digital, La bolsa de
Úrsula, al que imaginamos como una de las bolsas que Úrsula Le Guin nos
enseñó a valorar, a reconocer su importancia.
En esta bolsa, las memorias y experiencias colectivas, resultan críticas al
individualismo social y al relato hegemónico, dan lugar a una memoria
instalada en redes, acciones comunitarias y proyectos articulados por el potencial que posee la creatividad colectiva. Este dispositivo de acarreo junta
ideas y acciones de los sujetos políticos a quienes el patriarcado y sus
instituciones no logró debilitar.